El libro más leído de Septiembre no será ni una novela sobre oscura conspiraciones, ni un ensayo político ni aventuras de magos juveniles. Sin duda lo que se lleva es el catálogo de IKEA, repartido de forma gratuita buzón a buzón incluso en ciudades en las que no hay ninguna tienda de la multinacional sueca.
Si hasta ahora IKEA cobraba por su catálogo (si bien es cierto que incluía un bono que permitía reingresar el dinero en la primera compra) y permitía descargarlo gratis por internet, este otoño la estrategia por parte de sus responsables parece aún más agresiva y se están gastando una importante suma en una tirada descomunal en toda España (amén del coste de distribución).
Y creo que han acertado. Compañeros del trabajo, vecinos, la cola del supermercado… muchas gente hablando de Ikea y su catálogo, todo un acierto del área de Marketing. A pesar del problema de la uniformidad, los cierto es que la fórmula de bajo precio y diseño contemporáneo la han convertido en todo un símbolo del comercio moderno.