Según está la situación inmobiliaria en España estamos asistiendo ante un fenómeno curioso. Los españoles están empezando a comprar viviendas en el extranjero como inversión, ya que las rentabilidades de la vivienda nacional no logran tener una rentabilidad suficiente.
El fenómeno ha sido bastante brusco. En 2003 los españoles invirtieron en vivienda fuera de España 385 millones de euros. En 2004 812 millones de euros. En 2005 1.512 millones y en 2006 2.346 millones. Es decir, la cifra no hace más que incrementarse (y casi se duplica cada año).
Cuando se compra una vivienda en el extranjero como inversión hay que estudiar muy bien como son las leyes del país, aunque estén en la Unión Europea. Por ejemplo, puede que los gastos de compra-venta sean muy altos y las posibles revalorizaciones se vean diluidas. También hay que estudiar como está el mercado, no vaya a ser que entremos a mercados maduros como el español y no lo sepamos (aunque los precios sean mucho más bajos esto no es garantía de que suban).
En definitiva, las inversiones fuera aumentan pero hay que tener cuidado. No es oro todo lo que reluce.
Vía | El País
Más información | Invertir en el extranjero: Global Property Guide