En EEUU está a punto de suceder uno de los acontecimientos inmobiliarios más importantes de los últimos tiempos. La aseguradora Metropolitan Life ha puesto en venta bloques de edificios en el pleno centro de Manhattan. La propiedad en venta se extiende por más de 30 hectáreas cuadrados, formando 110 bloques con casi 11.000 apartamentos. La superficie en venta es equivalente a un décimo de Central Park y va desde la calle 14 a la 23. La tasación dice que el precio podría rondar los 5.000 millones de dólares.

Pero la polémica está servida. Los edificios fueron construidos con ayudas gubernamentales justo después de la Segunda Guerra Mundial. Ahora mismo dos tercios de los residentes aún disfrutan de precios regulados por ley, con un máximo de 2.000 dólares al mes por apartamento e incrementos anuales también regulados. Pero cuando un apartamento queda libre ya se puede alquilar a precio de mercado, y dichos precios pueden ser de hasta 4.000 dólares. Es una zona muy céntrica donde casi nadie puede permitirse vivir.

Pero ahora mismo viven ahí profesores, enfermeras, obreros, bomberos y oficinistas. Los últimos de clase media que podrán vivir en una zona tan céntrica. Una inquila, Evelyn, dice que es profesora retirada, de 77 años. Vive con su marido en un apartamento de tres habitaciones por el que pagan 1.400 dólares al mes. Cuando se mueran el nuevo propietario podrá cobrar fácilmente 3.500 o 4.000 dólares. Nadie como ella podrá permitirse un sitio así.

Vía | El País, Financial Times
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